He querido empezar la nueva andadura de este blog con esta frase, no sé muy bien de dónde sale, pero siempre me ha gustado y creo que es una buena máxima a aplicar en nuestra vida. Parecen dos cosas sencillas a priori, pero con el actual ritmo de vida a veces no son tan fáciles de conseguir, verdad?
TRANQUILIDAD. Las prisas y el estrés son los grandes enemigos de la tranquilidad, pero por muchas cosas que tengamos que hacer en nuestro día a día, y por mucho que pensemos que 24 horas no son suficientes, tenemos que esforzarnos por encontrar algo de tranquilidad, ya sea escuchando nuestra música preferida en el camino de vuelta del trabajo, relajándonos en la ducha al principio o al final de la jornada, sacando al perro a pasear... hay tantas maneras de conseguirlo como personas hay sobre la Tierra, cada uno tenemos que encontrar nuestra manera, pero en este blog intentaré dar ideas...
BUENOS ALIMENTOS. Sobre este tema podría escribir durante horas, y así lo haré, pero poco a poco. Lo que está claro es que somos lo que comemos, y si tuviéramos ese pensamiento en mente cada vez que nos llevamos algo a la boca seguramente comeríamos mejor. No se trata de obsesionarse con comer sano, a todos nos apetece comer algo "poco saludable" de vez en cuando, pero se trata de tener unos buenos hábitos alimentarios y aprender a escuchar a nuestro cuerpo.
Pero ya hablaremos de todo esto con más calma, porque ahora mismo mi cuerpo me está pidiendo la cena y no le voy a hacer esperar más. ;)
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